Varios estudios realizados en grandes empresas han demostrado que desarrollar procesos de Coaching profesional ofrece grandes ventajas, tanto en los empleados que reciben el Coaching, como en el clima general de la empresa en la que se practica, suponiendo esta serie de beneficios:
- Favorece que las personas se adapten mejor a los cambios.
- Promueve y refuerza los valores y compromisos de los empleados.
- Motiva a las personas hacia la producción de resultados sin precedentes.
- Fortalece las relaciones y hace más efectiva la comunicación.
- Mejora la colaboración, el trabajo en equipo y el consenso.
- Desarrolla la potencialidad en las personas, permitiéndoles alcanzar los objetivos propuestos.
El Coaching profesional debe dirigirse a todas aquellas personas que sean importantes para el desarrollo y el buen funcionamiento de la empresa, como pueden ser:
- Directivos y ejecutivos.
- Jefes de departamentos.
- Personas claves como creativos, comerciales o responsables de RRHH.
- Líderes de equipo a todos los niveles.
¿Cuánto tiempo debe durar un proceso de Coaching profesional?
Como ya comenté anteriormente, no hay una duración determinada, ya que cada situación es diferente, pero para aprovechar al máximo el efecto del Coaching, se debe considerar en principio una acción de 3 meses con 2 o 3 sesiones a la semana. No obstante la duración se puede prolongar en el tiempo, si fuera necesario. Estableciendo el Coachee y el Coach el tiempo necesario que vieran conveniente para lograr los objetivos planteados.
¿Para qué sirve el Coaching profesional?
En el ámbito profesional, el Coaching debe actuar como nuevo liderazgo para conseguir los objetivos importantes de manera efectiva, siguiendo estas tres premisas:
- El trabajo debe verse como algo importante.
- Los valores deben orientar todos los planes, las decisiones y las actuaciones.
- Debe llevarnos a una meta comprendida y compartida por todos.
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